Señores: Antes de entrar en el debate de ayer entre Biden y Ryan, os tengo que comentar una anécdota sobre lo que me pasó ayer en Wall Street. Quedé con un amigo para comer y él es estadounidense, de religión judía. Estuvimos hablando sobre el desafortunado hecho trágico que en unos años, los protestantes y judíos vamos a ser minoría en EEUU, porque desafortunadamente, los católicos serán mayoría por culpa de la inmigración invasión de Hispanoamérica. Hay que aclarar, cuidado, que condeno comentarios aquí que ataquen personalmente a personas por su raza o religión. Lo que sí pienso es que si los protestantes y judíos nos convertimos en minoría, será malas notícias para los amantes de la libertad religiosa. Pues bien, en toda esa conversación, también salió el tema «alemán» y yo le comenté lo que está haciendo Alemania con el euro. Una de las camareras del local es alemana y se me acercó a la mesa, diciéndonos que no pudo evitar escuchar nuestra conversación y que estaba harta de la Unión Europea. Me dijo, cito textualmente: «¿Eres español o francés?» Yo: Soy español y español de origen. ¿Qué opinas sobre la situación que está atravesando Europa? Me dice: ¿Quieres que te sea franca? Yo: ¡Claro! Ella: «Alemania paga para sus primos pobres. No me refiero a España, que ya no puede hacer otra cosa, sino a Grecia. También me gustaría saber quién es el idiota de mi país que tuvo la ocurrencia de aprobar el euro. Es demencial». Le dije que tenía toda la razón, por supuesto. Ojo, también le aclaré que Grecia también ha cumplido muchísimos deberes y eso Alemania debe respetarlo. Me dijo que entendía mi postura, pero que seguía pensando que «muchos griegos» son vagos. Yo, como chico del sur de Europa, no admito que se nos descalifique. Cuando le dije que España ha hecho más para reducir el déficit que Alemania y que no permito que Alemania pisotee a los países débiles, una mesa compuesta de chicos griegos norteamericanoos me aplaudía. Me decían: «Eres un tipo genial, como se nota tu franqueza al hablar». Les comenté que por lo general los europeos podemos ser francos, sobre todo españoles e ingleses en materia política.
Bueno, ahora al debate entre Biden y Ryan.
Lo que vimos en el debate de anoche fue realmente un debate entre dos generaciones: una, anticuada, rancia, la de Biden y otra, actualizada, moderna, consecuente, la de Paul Ryan.
Biden fue sentimental, condescendiente y chulesco. Eso no es aceptable para nosotros los jóvenes. Cada tono sentimental de su discurso nos llevaba a la época de Roosevelt en sus charlas a católicos pobres en sus barrios como Scranton, Pensilvania, Chicago, San Francisco y Filadelfia.
En los años 30 aún se mantenía mucho el acento regional de los americanos porque no existía, por suerte, la influencia de la cultura en masa que acaba uniformizando a todo el mundo. En esa cultura, la emoción era mucho más efusiva que ahora en un debate.
A Biden parece que le gusta la ópera y los Demócratas estarán apasionados por su chulería y espectáculo ofensivo. Yo francamente estoy ofendido un poco con Biden, debido a su falta de respeto a Ryan.
Qué ironía la de Obama, cuya campaña es «Sin Drama» y luego tener a un hombre como Biden, que es más dramático que una década de novelas de putas latinoamericanas engañadas por sus novios latinos, católicos y sensuales.
¿La reacción de la gente? Una mezcla. Mi primo dice que Biden fue mejor, porque a él le gusta la chulería y la agresividad sin límites. A mi no me gusta jugar sucio ni me gusta esa forma de ser con un caballero joven como es Ryan. Muchos votantes independientes han dicho que a pesar de que les gustó más Biden, éste fue más irrespetuoso y eso no es aceptable para los norteamericanos. Los americanos, al igual que los españoles decentes, quieren políticos que sean más respetuosos y que se comporten como los americanos se tratan entre ellos: respetuosos y discretos. Es decir, saber escuchar a los demás sin faltar al respeto. Para esa gente decente, Biden será repulsivo o irrespetuoso. Biden es una caricatura de lo peor que está pasando en la política.
Ryan es de otra época. No del restaurante de los 50s sino del gimnasio. La época de Ryan es meritocrática, sin elitismos demócratas, con jóvenes muy ambiciosos no interesados en la política trasnochada socialdemócrata que ofrece Obama.
Esa es una generación muy consciente de las cosas. En esa generación, se suele mirar mal a un tipo tan emocional como Biden.
Ryan fue duro aunque algo ausente a veces. Pudo subrayar que Obama no tiene planes y que ha empobrecido más a EEUU.
Lamento que no se haya hablado más sobre la sanidad de Obama o la discriminación positiva. Algunas propuestas fueron interesantes, como el plan de impuestos de Romney y la falta de ideas de Biden, que solo quiere castigar a los que más producen y trabajan. REPULSIVO.
Biden podrá pegar puñetazos en la mesa y hacerse el demócrata militante, pero la gente lo que quiere es un empleo y no seguir subvencionando a personas que pueden trabajar pero prefieren votar Demócrata para mantener las subvenciones.
Añado unas fotos que he sacado ayer – son de Hamilton y en el sitio donde desgraciadamente fue asesinado por el depravado Aaron Burr. Es el duelo más famoso de EEUU. También estuve en Wall Street, como ya os he dicho, pero las fotos de allí ya son muy conocidas.
liberalismodemocratico.wordpress.com 
http://es.euronews.com/2012/10/12/joe-biden-recupera-el-terreno-perdido-por-barack-obama/
Sociata, ¿qué opinas de esto?
http://blogs.publico.es/elmundo-es-un-volcan/2012/10/12/la-enfermiza-obsesion-de-vargas-llosa-contra-chavez/
Hola,
Bueno a mi las elecciones de EE.UU no me interesan mucho como ya dije pero por lo que se dice por ahí igual que el primer debate lo ganó Romney, este parece que lo ha ganado Biden.
Alfredo, me resulta muy chocante como estás defendiendo a Ryan, un católico próximo al Tea Party. Cuando pasen las elecciones y los republicanos pierdan, me parece que lo crujirás vivo.
Bueno ahora a lo que me interesa, a lo de la chica alemana. Cuando tengas otra conversación así con un alemán le dices que tienes un «amigo» en España que les diría esto:
– El euro es un negocio para Alemania. Alemania solo paga por sus «primos pobres» por los fondos de cohesión, algo que nada tiene que ver con la crisis. Todo lo que Alemania pone de ayuda para los rescates son préstamos con interés y que, además, es lo que permite que sus bancos no tengan impagados y su economía siga financiándose.
– Si Alemania o los alemanes notan que su nivel de vida comparativa con el resto del mundo ha caído respecto a la época de la RFA se debe a dos cosas: A las políticas de contención de la inflación, que hacen que los salarios no suban, y a la absorción de la RDA mediante un mecanismo pésimo que ha costado mucho dinero inútil a los lander occidentales.
– El futuro de Alemania es la crisis, que no se crean a salvo. Cuando los países del sur no puedan pagar se acabará el préstamo en Alemania y si estos países salen del euro bajarán sus exportaciones y el flujo de dinero que reciben de los países con problemas (por «evasión» de capitales).
Además, cuando su querida canciller cumpla su objetivo y en países como Portugal los salarios sean de 500 euros al mes. ¿Qué van a hacer las industrias alemanas? Deslocalizarse en los países del sur del euro con costes salariales miserables, destruyéndose empleo en Alemania. Pase lo que pase, revienten los países del sur (como es muy probable) o no, el futuro para Alemania es jodido y no por el euro en sí, sino por su uso suicida del BCE.
Y si no les vale esto siempre podemos ir al argumento facilón. Todos los países del sur (Portugal, España, Italia, Grecia) tuvieron dictaduras impuestas. Los alemanes, en cambio, votaron a su propio dictador. No está de más recordárselo para que se den cuenta que son los menos indicados para dar lecciones políticas a nadie.
Saludos,
Pedro, no, no en absoluto «defiendo» todo lo de Ryan. De hecho ayer dije que lamenté que por primera vez en la historia, los dos candidatos a la vicepresidencia son católicos (y la moderadora también subrayó ese hecho. Dijo que era algo nuevo). Lamento el catolicismo de Ryan y lo he dicho muchas veces.
Creo que Biden fue «fuerte», pero muy abusivo a veces o condescendiente. Por eso pienso que «perdió» moralmente hablando aunque personalmente yo también tengo ese «problema». Es decir, que puedo ser bastante «abusivo» en un debate. Son fallos personales.
En cuanto a tu recomendación, me ha gustado y por supuesto lo comparto. De hecho esta noche voy al mismo restaurante y la camarera esa estará allí. Quiero dar caña.
PD: Yo más bien diría la señora alemana, ya que esta es mayorcita…
El euro -realmente- no es un negocio para los alemanes. ¡Es un negocio para la banca basada en Alemania! Frau Merkel es una gerente del Deutsche Bank.
@Peter Foran: Vargas Llosa es un gran escritor, pero lamentablemente ha tarifado su pluma a quien le dé de hartar. Cada vez se vuelve más patético en sus apreciaciones políticas. Y no lo digo porque se autodenomine liberal, sino por su tendencia a mentir. Para mí es un hombre que ha perdido credibilidad con tanta soflamilla ridícula y carente de sentido.
Mejor que le siga oliendo los pedos a Doña Esperanza allá en Madrid y se olvide que existe América Latina de una buena vez.
Sr. Coll: Romney no conecta con los niños, los ofende, y eso lo hace extremadamente vulnerable, pues los padres «non white» para evitarse líos complacen a sus críos; aquí un pequeño ejemplo:
http://aristeguinoticias.com/1110/mundo/ap-pide-perdon-por-foto-de-nina-viendo-trasero-de-romney/
AP ahora quiere desinformar, pero, en realidad, la menor se sintió ofendida porque Romney se creyó Esperanza Aguirre tratando con Vargas Llosa.
A mi el tal Ryan no me cae bien. Los anglosajones dirían que es un «pussy»…Por supuesto, Biden me cae aún peor.
De Biden recuerdo hace unos años que montó un numerito en el Senado (o Congreso, no recuerdo) sobre unos atletas que supuestamente utilizaron sustancias para mejorar el rendimiento. El tipo no sabía de lo que estaba hablando, dijo estupidez tras estupidez y encima con la contundencia del que tiene la razón….Naturalmente, todo el que no conoce el tema se habrá convencido de que «habló bien». Sin haber visto el debate, es muy probable que hiciera más o menos lo mismo.
Algo les falta a Romney y a Ryan.
Yo tengo la teoría de que pueden llegar a ser muy buenos conservadores cuando entrenan para ello, pero que en cuanto flojean en dicho entrenamiento y dejan ver lo que en verdad llevan dentro el souflé se les desinfla demasiado rapidamente.
«Mejor que le siga oliendo los pedos a Doña Esperanza allá en Madrid y se olvide que existe América Latina de una buena vez.»
Es raro que concuerde con sociata.