En los últimos tiempos, hemos visto en España como un creciente número de gente entregada a la propaganda interesada no ha dudado en arremeter contra aquellas personas que luchan por el bienestar de todos, el colectivo, acusándonos de «vivir en el lujo» o de ser «pijiprogres». Varios compañeros mios viven en pisos muy bonitos de Valéncia. Incluso, algunos viven en chalets y es común oír comentarios despectivos tipo «¿qué hace un comunista en un chalet»? O, por ejemplo, a mí me han llegado a decir los libegales cosas como «joer, tan democrático que te haces y viajas muchisimo, vives de lujo». En un reciente artículo de la revista Vox, donde se cita al columnista del New York Times Anand Giridharadas, se dice lo siguiente:
‘Don’t console yourself that you are the 99 percent,’ ‘If you live near a Whole Foods; if no one in your family serves in the military; if you are paid by the year, not the hour; if most people you know finished college; if no one you know uses meth; if you married once and remain married; if you’re not one of 65 million Americans with a criminal record — if any or all of these things describe you, then accept the possibility that actually, you may not know what’s going on, and you may be part of the problem.’
No, no lo voy a traducir. Aprende distintas lenguas.
Giridharadas dice que antes de criticar al «1%», a la élite financiera que nos gobierna, dice que primero debes «revisar tus propios privilegios».
En vez de explicarnos qué significa todo eso, VOX y Giridharadas dependen de descripciones muy extrañas y pintorescas a la hora de decirnos qué significa «privilegios».
Obligar a la clase media a reconducir su atención hacia abajo (y hacia dentro) en vez de contra los verdaderos jugadores de élite arriba, VOX y Giridharadas están siguiendo el jueguito de la derecha, esta vez siendo los tontos útiles. Una cosa es avergonzar a la clase media (y de sobra hay motivos para hacerlo) y otra es entretenerles y callarles sobre el poder real, con el mensaje muy claro de que «bueno, podría ser mucho peor».
Esa mentalidad, tristemente, ha hecho mucho daño a los países occidentales porque los ha incapacitado para seguir en la lucha por tener más derechos y más democratización.
Pero analicemos la realidad a la luz de lo que nos dice el propagandista Giridharadas. En USA, solo un 5% de adultos ha usado metadona en su vida. La cadena Whole Foods aparece en toda zona que cuente con un centro urbano importante. Desde el 2010, un 80% de los norteamericanos vive en zonas urbanas. Más del 33% de los americanos tiene titulación universitaria. El 57% de personas menores de 50 tiene un familiar que ha servido en las fuerzas armadas, pero solo un 33% de los menores de 30 dicen lo mismo. Eso es MUCHO MENOS que el 99%.
El «ser del 1%» no tiene nada que ver con un estílo de vida concreto o con los hábitos de consumo particular. Tener un Master y tomarte un batido orgánico en el Whole Foods no te convierte en un elitista financiero que domina el mundo. Se trata de relaciones socioeconómicas concretas, denunciadas ya por economistas como Piketty o el franco-español Emmanuel Saez. Son estudios que dejan bien claro cómo esta minoría que no alcanza ni el 1% de la población mundial se ha ido enriqueciendo masivamente en detrimento de los demás – con la consecuencia del estancamiento económico y el empobrecimiento de todos los demás.
El «1%» no es un temible cuco amorfo dentro de todos nosotros, como quieren hacernos creer en VOX. Es una clase MUY REAL. No necesitamos una lista de «síntomas» culturales que supuestamente mantienen para saber quiénes son. Solo basta con ver los números.
Si tu hogar – o siendo generoso – si la casa de tus padres tiene unos ingresos anuales que superan (en España por ejemplo) los 500 mil euros, eres, de hecho, parte del 1%. Eso es independientemente de si esnifas cosa, fuiste a la mili, o te has casado tres veces. Incluso, si la mayoría de tus amigos consumen en el bareto de la esquina y no en un bar para «pijos», no quita la realidad económica.
En otras palabras, la lista de Giridharada es bazofia, son paparruchas. ¿Y entonces qué es ser del 1%? ¿Es solo lo que ganas al año? No – se trata de la clase donde estás. En qué posición estás.
La categoría de «clase» es relacional, no es una progresión. La mayoría de los «super ricos» ganan su dinero explotando el trabajo de los demás y con su propiedad privada – sus acciones empresariales, sus inversiones, etc. Los ricos del 1% hoy en día, a diferencia de los de hace 70 años, harán todo lo posible (con violencia si hace falta) para mantener sus privilegios cueste lo que cueste. Ni siquiera el derechista más capitalista de los años 30 era tan capitalista y egoísta como un progre-urbano hoy en dia…que por mucha retórica progresista en lo social que tenga (como Barack Obama), no deja de ser reaccionario cuando se trata de lo que él percibe es «su dinero». En España tenemos el mismo fenómeno. Gente que se hace llamar de «izquierdas» y a la vez cuando se trata del tema de los impuestos, son mas derechistas que la propia Thatcher. ¿O es que ya nos olvidamos de la política fiscal ultra capitalista del PSOE?
Incluso, cuando los ingresos de la élite (normalmente los menos pudientes de ese grupo selecto) se derivan principalmente de sus altísimos salarios (en contraposición a los beneficios que generan ciertas inversiones) es mucho más probable que reinviertan ese dinero en acciones, o propiedades – y por supuesto educación de élite y otras oportunidades para sus retoños, antes que reinvertir en la clase media o media-baja mas bien que ya no tienen nada una vez han pagado las facturas.
Cuando se bajan los impuestos sobre el capital aumentando las tasas universitarias y destrozando los servicios sociales públicos, el 1% se beneficia mientras que la gran mayoría del 99% pierde mucho. Cada vez que aprueban una ley dificultando ir a la huelga o formar parte de un sindicato, gana esa élite y los demás pierden mucho.
Descubrí hace tiempo lo siguiente: si es bueno para el 1%, es malo para ti. Para que alguien tenga mucho, es necesario que otro tenga poco. Por eso vamos a tener que tomar decisiones en los próximos lustros: tendremos que entrar en conflicto con esta élite pequeñísima y sus instituciones (que solo ahora sirven esos intereses) si lo que pretendemos es ganar un futuro más justo e igualitario, democrático y de bienestar para nosotros y nuestros hijos.
Al sustituir las relaciones de clase con una lista de supuestos «privilegios» como comprar en tal o cual supermercado o vivir en tal o cual vivienda, VOX intenta hacernos creer que hay miseria sin villanos. De países sin clase dirigente que no se beneficia materialmente y directamente del sufrimiento económico de los demás. Esta omisión no es solo incorrecta – nos roba de cualquier debate posible y de generar una política dura de oposición que podría cambiarlo todo.
¿Por qué entonces «mirar hacia dentro» y seguir ignorando los hechos reales? ¿Por qué seguir peleando sobre quién tiene mejores condiciones laborales o vive en un ático en vez de un barrio pobre para hacernos pensar que «todos» somos responsables de la miseria y la desigualdad brutal cuando la realidad es que los responsables son una pequeñísima minoría de millonarios y multimillonarios en Davos chupando vino y sobornando a los políticos con su tráfico de influencias?
Esta élite anda nadando en un mar de triunfalismo y hablan como dueños del mundo. Dueños del mundo no pueden ser, porque por lo menos dueños de nosotros no podrán ser JAMÁS.
A ver si nos centramos más en la clásica lección: «conoced vuestro enemigo» y construir una solidaridad real a partir de ese reconocimiento. ¿Tenemos privilegios algunos? Sí, por supuesto. Pero en vez de compararnos entre nosotros o con el vecino, a ver si comparamos con el dirigente de un banco famoso que dirige fondos de gestión también conocidas como «hedge funds» en inglés? Que no nos engañen. Tu enemigo no es el pijo que se toma un batido en un bar caro o el sindicalista que vive en un chalet de sus padres. El enemigo es muy concreto, tiene nombres y apellidos, no alcanzan ni el 1% de la población mundial e impiden cualquier regeneración democrática. Obremos en consecuencia para derrotarles definitivamente.
Don Alfredo, he aquí un artículo muy interesante, del que estaría gustoso en conocer su opinion, si no es mucha molestia. Ya me disculpará que no trate exactamente del tema de esta entrada suya. Gracias.
http://www.jotdown.es/2015/04/votos-como-piedras/
Y sobre su entrada, le comento lo siguiente.
Estoy bastante de acuerdo con lo que dice. A ese 1% de la élite lo que le conviene es que nos peleemos entre nosotros, sobre nuestros «supuestos» privilegios, en vez de dirigir nuestras críticas y ataques contra ese 1% que cada vez quiere más y no se contenta con nada. Su lema es el «divide y vencerás», «divide & conquer». Y como afirma, ahí tenemos a personajes y partidos supuestamente de izquierdas haciéndoles el juego, y gustosamente: como se dice vulgarmente, además de p**a, a poner la cama.
No sé porque una persona tiene que ser pobre como las ratas, o vivir debajo de un puente, para poder ser capaz de criticar la explotación del hombre por el hombre, o para defender políticas de impuestos igualitarias.
Entrada muy interesante, que compartiré por twitter (deberías hacerte twitter aunque solo sea para dar difusión a los escritos), y muy certera en mi opinión.
Esta moda de criticar al «pijo-progre»(o las mil formas que tienen que llamarlo) no es más que una reacción producto de un complejo y una debilidad transparente: Desde el punto de vista moral, desde el punto de vista cultural de nuestra sociedad, la defensa de los débiles y de quienes no se pueden defender por si mismos es el comportamiento moral «adecuado» o «superior». La derecha económica siempre clama contra la supuesta «superioridad moral de la izquierda», pero es que esa rabia es precisamente el síntoma de que ellos mismos la reconocen.
En este punto tan solo les queda dos opciones para combatir esto. 1º/ Hacer creer a la gente en fantasías de «capitalismo popular» o de libertarianismos que mágicamente harán a todo el mundo rico, o 2º/ Atacar el supuesto cinismo de los defensores de la igualdad, haciendo creer que son todos unos falsos por no vivir en un cajero automático y, así, extender la sospecha y los sentimientos egoístas por la generalidad para intentar neutralizar las ideas.
Esto ya pasaba desde antes de la crisis (¿cuantas veces se ha atacado a los izquiedistas que tenían una posición económica solvente?) pero se ha hecho especialmente evidente con el estallido de la crisis. Ante un hundimiento económico, es muy fácil orientar la rabia de la gente ante otro grupo social fácilmente identificable y que convive con ellos. Al fin y al cabo los «ricos» no se ven en los bares de barrio, ni en los centros comerciales de masas ni en la piscina municipal. A quien sí ves es al que es como tú, pero con situaciones laborales o económicas circunstancialmente distintas.
Y así al asalariado privado se le ha hecho creer que el funcionario era un privilegiado, por ejemplo, o que quien cobraba el paro y trabajaba en negro era el culpable de los males de España, o el inmigrante que hundía los sueldos. Son falacias lógicas, simplismos que se pueden soportar sobre la experiencia personal de cada uno y que son fácilmente entendibles. Los grupos de manipulación social trabajan así: Se crean marcos y esquemas simples, intuitivos y absolutamente cerrados, que obvian cualquier complejidad y se venden como esquemas científicamente evidentes, para que la gente rechace fanáticamente cualquier cosa que modifique el irreal sistema creado.
Y lo más cachondo de todo es que quien dice que el funcionario o el trabajador fijo es un privilegiado suele cobrar siempre más de 1 millón de euros al año…
En un sistema económico siempre hay privilegiados y no privilegiados, pero no se puede confundir al que tiene un pequeño privilegio sobre la media (un sueldo por encima de la media, una propiedad sin hipoteca, etc) con quien tiene una posición de fuerza y de privillegio dentro del sistema económico, que no es coyuntural ni mínima.
La multiplicidad de enemigos siempre lleva a la derrota, y por tanto hay que tejer alianzas o respetar ciertos privilegios para poder acabar con otros. Para minimizar los privilegios del 1% (o del 0,5% o del 3%, da igual) deberemos tolerar algunas cosas que a lo mejor no son razonables, no son igualitarias o no son justas. Pero hay que saber priorizar, entender la necesidad de no multiplicar enemigos y sí aliados.
Saludos,
Hola Peter: No estoy a favor del voto obligatorio, pero sí estoy a favor de generar mecanismos que imposibiliten la total abstinencia de lo político. Es necesario que de alguna manera la gente se pronuncie y se politice. Nadie es realmente «apolítico» – incluso la gente que dice eso suele ser antisocial y apoyar medidas que no son buenas para el conjunto de la sociedad. No abogaré por el voto obligatorio, pero sí abogo por engendrar canales de todo tipo para que al final todo el mundo esté participando y se «moje». Ningún hombre es una isla.
Saludos
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Pedro:
Gracias por compartir. La verdad lo estoy pensando ya que me lo has mencionado a veces y tienes razón (lo de Twitter) y creo que es otra herramienta más.
«Esta moda de criticar al “pijo-progre”(o las mil formas que tienen que llamarlo) no es más que una reacción producto de un complejo y una debilidad transparente: Desde el punto de vista moral, desde el punto de vista cultural de nuestra sociedad, la defensa de los débiles y de quienes no se pueden defender por si mismos es el comportamiento moral “adecuado” o “superior”. La derecha económica siempre clama contra la supuesta “superioridad moral de la izquierda”, pero es que esa rabia es precisamente el síntoma de que ellos mismos la reconocen.»
Sí – bueno esto es clave y se debe profundizar. Creo que en el terreno de lo ético-moral, deben sentirse arrinconados. Por ello, es necesario que todos nosotros juntos los que compartimos estas ideas/actitudes, sigamos como sea posible en esto de la difusión y toma de la educación en este país desde los niveles más tempranos-infantiles.
«Ante un hundimiento económico, es muy fácil orientar la rabia de la gente ante otro grupo social fácilmente identificable y que convive con ellos. Al fin y al cabo los “ricos” no se ven en los bares de barrio, ni en los centros comerciales de masas ni en la piscina municipal. A quien sí ves es al que es como tú, pero con situaciones laborales o económicas circunstancialmente distintas.»
Correcto. Es aquello de «dividir» para conquistar. Lo hacen también con el tema migratorio. Obviamente la inmigración ha sido un problema para este país (no me refiero a los inmigrantes como individuos sino el proceso). Pero ¿qué hace la élite? Crea crisis donde no las hay realmente, como por ejemplo inventarse ese cuento de que los inmigrantes «roban empleo y se cargan la sanidad». NO. Quienes se cargan la sanidad son ellos, los de la élite y son ellos los que usan la inmigración como arma pretexto para destrozar los poquísimos derechos conquistados en materia social.
«Y así al asalariado privado se le ha hecho creer que el funcionario era un privilegiado, por ejemplo, o que quien cobraba el paro y trabajaba en negro era el culpable de los males de España, o el inmigrante que hundía los sueldos. Son falacias lógicas, simplismos que se pueden soportar sobre la experiencia personal de cada uno y que son fácilmente entendibles. Los grupos de manipulación social trabajan así: Se crean marcos y esquemas simples, intuitivos y absolutamente cerrados, que obvian cualquier complejidad y se venden como esquemas científicamente evidentes, para que la gente rechace fanáticamente cualquier cosa que modifique el irreal sistema creado.»
Sí, es uno de los problemas más importantes en materia social. Este tipo de actitudes y fantasías. Se ha visto también con los funcionarios y profesores – «mira qué pocas horas trabajan», como si fuera culpa de ellos que los demás tengan horarios laborales chinos y sueldos bananeros. Los responsables no son los dirigentes de UGT o CCOO…hay responsables, pero no son precisamente sindicalistas. Suelen llevar traje y corbata, trabajan en el seno de la UE y Wall Street. Estos son hechos. El mundo tiene sus «dueños».
«Y lo más cachondo de todo es que quien dice que el funcionario o el trabajador fijo es un privilegiado suele cobrar siempre más de 1 millón de euros al año…»
Sí, mira el ejemplo de Esperrancia Aguirre….o el presidente de la patronal española…
Completamente de acuerdo en todo lo demás también. Será necesario primero que las «clases bajas» hagan esa concesión y que por otra parte, los que tenemos más privilegios nos alejemos de actitudes reaccionarias y desleales hacia los intereses colectivos de nuestra patria.
Saludos
Don Alfredo,
Me parece un rumbo equivocado, defender que no se generalize las cualidades malas de un grupo para pasar a generalizar a generalizar sobre las cualidades buenas del otro. Esto también es una falacia y lo único que lleva es precisamente, a crear un escenario de enfrentamiento donde dos colectivos se vean como enemigos, donde mi/su/nuestra opinión se impoga a los hechos, sean los que sean. Los problemas de nuestra patria son más importantes y pasan por no solo defender los derechos de los menos privilegiados ( que tambien ) sino por analizar las ineficiencias del sistema, por potenciar los factores de desarrollo económico y social y por fomentar el entendimiento y no la búsqueda del enemigo externo.
Un saludo.
Javier: No entiendo muy bien, lo siento. Nadie aquí ha hablado de las «cualidades buenas» de nadie sino más bien centrarnos en el hecho de que sí hay un poder real (como en toda época histórica) y que debe ser derrotado si lo que pretendemos es (y mas le vale que ese sea su objetivo también) profundizar en democracia y ampliarla.
Sobre el enfrentamiento, es que ya hay enfrentamiento – hay una guerra económica explícitamente declarada a nuestro país y sus gentes mas débiles como también pasa con el tercer mundo y eso tiene responsables, que no quepa duda, tienen nombres, sabemos quienes son, qué instituciones dirigen y por qué aplican esas desastrosas y crueles recetas. Si no quieren hablar de enfrentamientos, no haber declarado una guerra sin tregua a los profesores, a pensionistas, a madres solteras que no llegan a fin de mes y sus hijos se dedican a la delincuencia, en definitiva, un desastre antidemocrático que no se había visto en Occidente desde el siglo XIX. Estamos volviendo a aquellos tiempos en materia de derechos laborales, prestaciones sociales, etc. NO ES ACEPTABLE y si esto es enfrentamiento, bienvenido sea. Que yo sepa, esa exigencia no se la imponen cuando destrozaron nuestra industria y provocaron auténticas guerras socio-económicas. Ya va siendo hora de identificarles y decirles BASTA, no se aguanta más y precisamente porque quiero mucho a mi patria no estoy dispuesto a que vengan unos sinvergüenzas financieros a imponernos qué condiciones y qué políticos debemos tener. ¿Qué clase de país somos? Sin dignidad, sin futuro, con creciente pobreza. NO lo acepto.
¿Ineficiencias del sistema? Sí, muchas – especialmente el sistema impuesto antidemocráticamente y todo el régimen que llevamos padeciendo. ¿Es que acaso no se ha denunciado eso aquí también? Tenemos políticos ladrones, auténticos criminales en el Congreso de los Diputados que vendieron este país a intereses ajenos.
Enemigos los hay internos (el PPSOE) y externos — la Troika, el BCE, el FMI…hay muchos y negarlo me parece muy fuerte.
Saludos
Don Alfredo, don Pedro, me gustaría saber qué piensan sobre lo que dice en este artículo el mismo Pablo Iglesias:
http://blogs.publico.es/pablo-iglesias/1005/la-centralidad-no-es-el-centro/
Estados Unidos e Israel financiaron a ISIS:
http://actualidad.rt.com/actualidad/167054-eeuu-crear-estado-islamico-clarck
http://regeneracion.mx/mundo/el-mosad-creo-el-estado-islamico-revela-snowden/
Los felicito miserables de la OTAN, con su cuento de la democracia ahora el mundo corre peligro, mataron a Hussein, Gadaffi y ahora van a por Al Asad. Esos gobernantes eran unos hijos de p…, PERO ERAN UNOS HIJOS DE P… QUE MANTENÍAN A RAYA A LOS FANÁTICOS.
Gadaffi lo advirtio, si lo mataban Europa se llenaria de negros, y en efecto asi esta ocurriendo, solo preguntenle a los italianos.
Todo por el sucio petroleo.
Jaime
Demas esta decir que ellos financiaron a esos terroristas para derrocar a Asad, ahí tienes a los de ISIS.