Señores — Rara vez escribo sobre temas «personalistas» porque mi enfoque es el Derecho, la política y en general los temas relacionados y/o cotidianos. Pero, se acerca el fin de año y mañana terminan, «oficialmente», las lecciones mías sobre el Derecho bíblico (por cierto, un exitazo de clase gracias a la calidad del alumnado). Hoy he recibido dos correos electrónicos que me han alegrado el día porque al final mi trabajo tiene frutos. En uno, el Rectorado me ha informado que los alumnos están muy a gusto con mis clases y que desean contratarme como profesor de los suyos el año que viene en 2012 debido al éxito que están teniendo las optativas que ofrezco (Penal, Derecho Bíblico, Procesal Penal) que son mis «especialidades» así como Constitucional americano (USA).
En segundo lugar, he dado una suerte de «hoja de evaluación» a mis alumnos porque a mí sí me interesa la opinión sobre la calidad de mi enseñanza o bien sus defectos para poder hacer las correcciones oportunas.
He recibido un correo de un alumno que dice lo siguiente sobre mí y me ha gustado como es lógico:
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Estimado Alfredo:
Tiene usted razón en eso de que la educación en las universidades públicas españolas es (por norma general) bastante buena, pero hay una serie de aspectos deplorables.
– Aulas sobresaturadas. He asistido a clases con 150 personas en universidades públicas. No se oye nada, te sientas en el cacho y no ves cosas de la pizarra… Me gusta mi situación ahora en la privada con usted porque hay un máximo de personas en clase que permite aprender bien.
– Catedráticos: El titular de la plaza (catedrático estrella) da como mucho 1 «clase magistral» al año. El resto del año lo cierto es que las clases la da otro profesor. De usted, me gusta que tiene credenciales de universidades muy prestigiosas. Usted ya sabe que en nuestra universidad, a pesar de ser «católica» y sé que a usted eso no le gusta, el 90 % de los profesores son Doctores o abogados ejercientes con bastante experiencia.
– Educación personalizada: Aunque le parezca una tontería, valoro que usted tenga tan buena memoria sobre pequeñísimos detalles – usted se acuerda de caras y hasta el más minúsculo detalle de algún diálogo que esucha en la cafeteria y hasta la dirección del alumno. No en vano, los compañeros de clase dicen de broma que usted es como la «Gestapo» o la STASI en tanto que observa hasta el más minucioso detalle en una persona.
– De usted también suelen decir: «Con Alfredo te puedes tomar una copa entera de whisky e incluso reírte hasta llorar (por sus particularismos a la hora de criticar a determinados colectivos) pero eso no le impide suspenderte sin piedad cuando quiere». Con Alfredo como profesor, la vida se convierte en algo muy estrecho en relación con tu vida académica y hasta personal.
A pesar de todas esas cosas positivas, usted dice que se debe ser honesto y lo que no me gusta es la política universitaria en la que parece que todo el mundo convierte esto de la educación en un negocio. Tampoco me gusta su actitud respecto a los curas católicos que tanta dedicación aportan y hacen que el campus funcione de esa forma tan «respetuosa» como usted mismo dice. Usted está en su derecho cuando no comparte los puntos de vistas teológicos católicos pero no me gusta cuando directamente atenta contra determinados curas, llamándoles «sirvientes del diablo», teniendo en cuenta que a usted siempre se le ha respetado incluso siendo esta una universidad católica. Usted es un adulto y sabrá lo que hace con su vida en este tema pero personalmente no comparto sus actitudes.
A pesar de todo, creo que usted ha sido uno de mis mejores profesores y he aprendido un montón de cosas nuevas a la par que me he divertido muchísimo con sus anécdotas, sarcasmo casi «británico» y sus puntos de vista totalmente políticamente incorrectos, irreverentes y hasta ofensivos para muchas personas.
Usted no necesita pasar lista, Alfredo – la gente va a su clase porque la disfruta, porque es interesante como usted presenta los temas y como domina lo que conoce. El nivel es alto.
Espero que tenga una feliz Navidad aunque ya sé que no la celebra.
Saludos
liberalismodemocratico.wordpress.com 
Muchas felicitaciones por los frutos de su trabajo.
Yo leo con interés y atención todos us artículos, a pesar de que soy un completo ignorante en derecho.
De modo que le diré qué me gusta y qué no me gusta.
Valoro su sinceridad y su modo directo y ameno de abordar los asuntos, aunque yo pueda estar en desacuerdo con algunas de sus apreciaciones, como es lógico.
Lo único que no me gusta es cuando dice usted (o escribe) palabrotas. Pero esto no es un reproche, en realidad. No soy yo quién para juzgar a nadie. Es solo que tiene usted un nivel demadiado alto como para servirse de ellas. Pero cada uno es libre para hablar y obrar, y éste es un derecho divino que debemos agradecer a Dios.
En cualqueir caso, éste es uno de los blogs que yo recomiendo abiertamente a la gente con la que suelo tratar.
En fin. Le reitero mis felicitaciones. Que Dios nos bendiga a todos durante este nuevo año que está por llegar.
Te felicito Alfredo. Veo que te has ganado el aprecio de la mayoria de tus alumnos. Alguno debera odiar+e, pero la excepcion confirma la regla.
Mike:
Gracias por su comentario – usted siempre será bienvenido aquí.
En cuanto a su crítica – la verdad es que le doy la razón – intentaré ser más cuidadoso con mi vocabulario, sobre todo por la juventud. Lo que ocurre es que me indigno muchas veces y la mejor forma de expresarlo de forma gráfica es utilizando palabrotas.
No obstante, voy a intentar cuidar más ese tema. Siempre me interesa las opiniones sobre cómo mejorar el «servicio» que presto así que como cristiano, agradezco tu honestidad.