El aborto y Liberalismo Democrático

A raíz de las declaraciones de Andrés Álvarez y del autor del Tonel del cínico sobre el aborto, yo, como presidente de Liberalismo Democrático, he recibido varios correos electrónicos preguntándome acerca de mi postura y si forma parte del ideario de Liberalismo Democrático.

Estos dos jóvenes, colaboradores de Liberalismo Democrático, tienen todo mi apoyo, tanto en sus posturas como en su criterio sobre el aborto, que es el mismo que mantenemos de forma oficial en Liberalismo Democrático. No ha cambiado la postura.

Aprovecho para dejar mi breve comentario sobre esos dos artículos, más bien mi postura:

Los gobiernos no deben convertirse en el Gran Hermano. Si un gobierno crea ministerios para igualdad o incluso matrimonio, ¿qué opinión podrá tener de sus ciudadanos? Si tratamos a la gente como unos peones en un tablero de ajedrez no hay base cristiana, ni base religiosa, ni ninguna religión en absoluto. Es como si ahora la moda entre los que son religiosos se reduce en preguntar: “¿Qué pueden hacer los gobiernos acerca de estas cosas?”

¿Qué debemos hacer sobre el aumento de rupturas matrimoniales, qué debemos hacer los liberales clásicos? ¿Ir a las casas? ¿Decir que si el marido lleva una vida violenta y de alcoholismo la mujer no debe divorciarse? ¿Qué debemos hacer sobre las relaciones homosexuales? Yo ya he dejado bastante claro que esas relaciones me parecen abominables y rechazables, pero no es de recibo ni lógico pensar que es realista ir casa por casa, puerta por puerta, y meter al Estado en estas cuestiones. Cada vez que analizamos la Historia y vemos que los Estados se meten en ciertas cuestiones, la situación empeora.

Supongo que muchos hogares viven circunstancias terribles. Uno intenta demostrar que Dios es como un padre y cuando la criatura ve a su propio padre…pues claro, duda de Dios. Me refiero a padres violentos, drogadictos y poco productivos o los que tienen la desgracia de vivir en hogares monoparentales u homosexuales o de madres solteras.

Reconozco que el aborto es un tema de gran preocupación para los católicos y cristianos protestantes. ¿Cuál es mi actitud ante esto?

Yo creo que el aborto es permisible en algunas condiciones controladas. El aborto sólo se debe aplicar muy, muy poco después del embarazo; pero la idea de que debe ser utilizado como un método de control de natalidad me parece totalmente abominable. Aun así, hay veces que la vida de la madre puede estar en peligro pero esto debe ser una cuestión médica y no para los políticos o comentaristas.

La ley, tal y como existe ahora, no necesitaba modificaciones oportunistas para distraer de los verdaderos problemas de España que son: el paro provocado por el PSOE y sus prácticas socialistas, el aumento de la miseria, también debido al PSOE y su política irresponsable de derroche, y la pérdida de competitividad para España así como el aumento brutal de la inmigración ilegal en los últimos años que ha provocado el otro problema relacionado con el aborto: embarazos no deseados. La mayoría de las mujeres que abortan suelen ser madres extranjeras de países pobres. Yo creo que el peor castigo que puede sufrir un niño es tener una madre que no lo quiera, nacer sin ser deseado. Y por eso, no me queda más remedio que sumarme a las posturas de ambos autores citados arriba y declarar que esas son las posturas oficiales de Liberalismo Democrático.

Buenas tardes.

3 comentarios

  1. Pues que más que decir que estamos de acuerdo. Muchas gracias por la mención y el apoyo recibido.

    Saludos.

  2. valcarcel · ·

    Nada hombre, es siempre un placer ver que hay personas que no se dejan llevar por las oleadas del positivismo fanático que tanto caracteriza el liberalismo a lo francés o continental.

  3. Gracias, Alfredo, por tu apoyo y por aclarar la postura de LibDem. Mañana publicaré la segunda parte de mi escrito, que trata más bien del aspecto político de este debate.

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